Homologar la comunicación

Sigo sin poder entender el afán de destruir lo poco que estaba bien, no me quiero meter ni en política ni en cuestiones sociales y mucho menos en materia de corrupción;  de lo que estoy cierto, es de que las variables macroeconómicas más importantes (tasas de interés, inflación, tipo de cambio y Bolsa Mexicana) estaban razonablemente bien, y  por tres sexenios consecutivos nos habían permitido reactivar el crédito hipotecario, los créditos empresariales y el crédito automotriz, permitiéndole a un gran número de la población el acceso a un mejor nivel de vida, esto incluye también a personas que han podido utilizar su crédito INFONAVIT.

Sin embargo, llevamos cinco semanas oyendo y viendo a un sector dentro del nuevo Congreso, que no se pone de acuerdo y que propone iniciativas que denotan un alto nivel de ignorancia, prepotencia y resentimiento. Estoy seguro que en el futuro gobierno hay gente muy capaz e inteligente que entiende de sobra de lo que estoy hablando, pero también veo que hay una gran falta de comunicación y de liderazgo que está provocando un caos, caos que ya ni el futuro Secretario de Hacienda logra atenuar en los mercados. No se necesita tener maestría o doctorado para entender que las Reservas de nuestro Banco Central, son  del propio Banco de México y quién con su carácter de autónomo, decide el destino y utilización de las reservas;  en ningún caso forman dichas Reservas parte del presupuesto de la Federación. Así mismo, ¿a quién se le puede ocurrir siquiera mencionar tocar el ahorro del Sistema de Pensiones del país cuando no les pertenece el dinero de los propios trabajadores?, estas y un sin número de iniciativas más han provocado una creciente desconfianza en muy poco tiempo, misma que va a costar muchísimo trabajo recuperar.

Espero que el Presidente electo y su equipo económico puedan transmitir (respetando claro está las autonomías propias de cada poder) este mensaje a los legisladores para dejar de sembrar pánico, y con ello ya no lastimar más a México; reitero, estas acciones nos están haciendo mucho daño a todos los mexicanos de todos los niveles, provocando que el dinero y la inversión busquen otras alternativas o países que sí inspiren confianza y desordenando lo que considero se había mantenido a buen recaudo.

Espero con ansias un buen mensaje del Presidente electo este 1° de diciembre; y después un paquete económico responsable y disciplinado –únicamente con esos hechos– algo de confianza podría regresar, porque ya vimos que literalmente nadie tiene credibilidad en estos momentos tan delicados. En el entorno internacional centraremos la atención  en la reunión del G20 que se sostendrá en Buenos Aires,  en donde sin duda el tema más importante serán los planteamientos que puedan acrecentar o no  la  guerra comercial entre EEUU y China; este es un tópico que debe tener presente la futura administración, ya que no sólo el “enemigo” está en casa, sino que también puede haber fuertes choques y adversidades provenientes del exterior.

En lo personal creo que los descalabros en los mercados internaciones NO están marcando el inicio de una recesión, pero son cada vez más quienes piensan que el auge del ciclo económico expansivo ya terminó; esto último podríamos presumir que va a modificar la actuación de la Reserva Federal, en donde las alzas de tasa podrían  llegar pronto a su fin,  o bien irse mucho más lento.

@juansmusi

Noviembre 28, 2018

Deja una respuesta