No debería de bajar la FED

Hoy se espera que la FED tome su decisión de política monetaria, y es prácticamente un hecho que la tasa baja de 2% a 1.75%. De hecho, las probabilidades que esto ocurra según las encuestas al mercado en EE.UU. son mayores al 80%. De ser así, el mercado y Trump estarán parcialmente contentos porque la FED, con su política monetaria está contribuyendo a que la economía siga creciendo y que los mercados prolonguen su fiesta.

Y digo parcialmente porque ambos (tanto el mercado como Trump) quisieran que la baja fuera de 50 puntos base, una atrocidad. Dicho lo anterior, no estoy de acuerdo en que se baje la tasa, creo que no hay las suficientes razones para hacerlo. Es cierto que la economía está desacelerando y que los números más recientes marcan una tendencia bajista, pero, aun así, los números no son nada malos. EE.UU. se enfila a un crecimiento de entre 2% y 2.3% para todo el año.

Es un crecimiento bueno para una economía desarrollada y más aún para un país que entra a su onceavo año del ciclo de expansión cuando históricamente los ciclos duran 7 años. Los datos económicos en general, manufacturas, servicios, construcción de casas, empleos y consumo, todos han disminuido, pero insisto, no de manera preocupante.

Por si fuera poco, la reciente temporada de reportes trimestrales de empresas que cotizan en bolsa vuelven a ser mayoritariamente buenos y mejores a los esperados. La inflación, punto vital e importantísimo para fundamentar la decisión de algún recorte no está demasiado baja incluso la subyacente, al igual que en México, está muy cerca de su objetivo.

Cuando la baja de tasa es inminente es porque la inflación es demasiado baja y por otro lado la economía ya está muy deprimida, entre otras razones. Pues aquí, ni una, ni otra y aun así, lo más probable es que la tasa baje. Para mí el mayor factor en contra de esta decisión es que cuando realmente venga una desaceleración pronunciada o una recesión, que no deben tardar mucho (quizá ocurran en la segunda mitad del 2020 o a más tardar en el 2021), la FED no tendrá demasiadas “municiones” para atacarla y afrontarla. Si baja hoy, es posible que también baje en diciembre, lo cual ubicaría la tasa de referencia en 1.5%.

Si EE.UU. en 2020 entra en una recesión, tendrá solo un pequeño margen para afrontar ese ciclo recesivo, tal vez de 25 en 25 puntos base. En cambio, si hoy la FED no cede a presiones y no baja, se puede ir hasta diciembre para solo bajar una vez más. Cerraría el año en 1.75% y puede afrontar mejor el 2020.

También hoy conoceremos el PIB en México, y lo que espera el mercado es una contracción de 0.0% a -0.3%, la sorpresa pudiera venir si la cifra es más negativa aún. Con este dato, confirmaríamos que el crecimiento anual en el mejor de los casos rondaría 0.2% y 0.4% para todo el año.

Si este dato sale en línea a lo pronosticado no espero mayores reacciones, pero si sale peor a lo esperado, muy probablemente el peso lo resienta. Es imperativo un cambio de rumbo, medidas contra cíclicas y acciones del gobierno con la iniciativa privada que nos saquen de esta lamentable condición. Esta relativa estabilidad macroeconómica y cambiaria no es sostenible a largo plazo. De seguir así unos meses más empezaremos a ver efectos en las calificaciones crediticias de Pemex, el país, por ende en el tipo de cambio y eventualmente en la tasa de interés.

Me preocupa mucho, la lógica decisión de tantos funcionarios de gobierno que han decidido renunciar a sus trabajos ante un entorno adverso e imposible de soportar; te bajan el sueldo, te quitan las prestaciones y aprueban una ley para inactivarte del sector que conoces en la iniciativa privada durante 10 años. ¿A quién le interesa un empleo así? Segunda preocupación: el nivel de incompetencia de los que relevan.

@juansmusi

Octubre 30, 2019

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