2021: Un cierre difícil.

Esta semana se reúnen los Bancos Centrales de todo el mundo para sus juntas de política monetaria. Destacan la FED, el Banco Central Europeo, el Banco de Japón, el de Inglaterra, de Turquía, de Rusia y el Banco de México. La pesadilla es común; las altas inflaciones, excepto en Asia donde las presiones en los precios son menores.
En el caso de los bancos centrales de países desarrollados la tasa no se modificará aún, prácticamente todos bajarán los programas de recompra de bonos mensualmente. La FED podría aumentar de 15 mil millones de dólares mensuales a 30 mil, y lo más importante será el discurso de Jerome Powell en donde podría adelantar también el proceso de alza de tasa en mayo del próximo año. En el caso de las economías emergentes todos aumentaremos la tasa de referencia.
Brasil no ha escatimado y aumenta de 100 puntos base en adelante, Turquía debería de hacerlo, pero no es un banco autónomo y hemos visto cómo la dictadura se ha impuesto a las decisiones que harían sentido: por ello la lira turca se ha vuelto a devaluar por encima del promedio de la canasta de monedas.
En el caso de Banco de México esperamos un alza que bien podría ser de 50 puntos base en lugar de 25 que han venido aumentando. La inflación está altísima (en 7.37% la cifra anual), y por ello es que duras medidas podrían anticiparse y terminar el año con la tasa de referencia en 5.50%. En Brasil la tasa Selic ya está en 9.25% y esta semana podría llegar e incluso superar el 10%.
En muchos países del mundo estamos viendo la mayor inflación de los últimos 30 años. Un año que será recordado por el aumento de precios y la pérdida del poder adquisitivo. En el caso de México será la última junta encabezada por Alejandro Díaz de León. ¡Qué complicado momento para un relevo!
Sin ser concluyente la evidencia médica y científica, parece que Ómicron es de fácil contagio, con síntomas más leves, pero sin complicar demasiado las hospitalizaciones y la tasa de mortandad. Lo que es un hecho es que se recomienda la 3a dosis o “booster” para lograr una mejor inmunidad.
El tipo de cambio regresa a niveles de $20.80 pesos por dólar y con ello la proximidad de un nivel atractivo de compra; abajo o en $20.50 se debe considerar entrar o invertir en esa moneda. El próximo año muy probablemente los mercados moderarán sus rendimientos y más cuando la FED empiece su proceso de alza.
También en ese momento el dólar se fortalecerá contra el resto del mundo y veremos si el entorno económico ya es más favorable al que vivimos hoy, en donde la demanda ha superado a la oferta y donde los costos de materias primas y logística son una locura que los productores no pueden trasladar a sus clientes.
México seguirá luchando por conservar el grado de inversión y el gobierno federal, sin abandonar los programas sociales, buscará la manera de seguir inyectando dinero a Pemex reasignando recursos de otros programas.
Al final lo que está pasando es que de una bolsa se va a la otra y la perspectiva de riesgo de Pemex no aumenta por este aval del gobierno federal, pero lo que sí puede ocurrir es que eventualmente la paraestatal deteriore las finanzas públicas –y con ello la calificación crediticia del país. Dos semanas más para darle la vuelta a un año que fue también muy complicado y para que empiece un 2022 que igualmente será difícil, pero naturalmente, siempre tenemos la expectativa optimista de que sea mejor.
@juansmusi​​​​​​​

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