Control de armas: ¿La solución a la matanza de Newtown?

“Hemos hecho a un lado a Dios, y ahora cuando vemos tragedias como las de Newtown, Connecticut preguntamos ¿Y dónde está Dios?” dijo el ex gobernador de Arkansas, ahora titular del noticiero de Fox News Mike Huckabee, a colación de la reciente masacre en la escuela primaria en Estados Unidos.

Después de que el mundo volviera a enterarse del horror de la matanza en donde murieron 12 niñas y 8 niños, más 6 adultos, se volvió a pedir que se regularan las armas en nuestro país vecino del norte. En todas las redes sociales se leía la exigencia que pedía se regulara la posesión de armamento. Pero ¿en realidad eso haría que cesaran las matanzas en escuelas y lugares públicos en Estados Unidos?

En México no cualquiera puede comprar un arma, por ley, sin embargo sabemos que hay mucha gente que posee un arma y también sabemos que hay delincuencia en las calles.

Aunque son dos formas distintas de violencia; la primera es sin sentido, por locura pareciera, sin razón y la segunda por mafia, por impunidad. Por una descomposición social, pero sin embargo las dos formas son atroces e incomprensibles.

Más allá de regular el uso de pistolas, de castigar a los responsables de las matanzas, va más allá del porqué de la conducta irrisoria de personas como James Holmes (Colorado), de Eric Harris y Dylan Klebold (Columbine) o de Adam Lanza (Connecticut). Más allá de lo políticamente correcto, es ver la razón por la cual actúan así. Ver la vida familiar que llevaron estos hombres que truncaron las vidas de personas inocentes, de personas que comenzaban a vivir.

Familias rotas, familias disfuncionales que no brindaron el amor, el tiempo y la entrega que cualquier persona requiere durante su desarrollo evolutivo y emocional. Familias que seguramente fallaron en la formación de esos hombres que destrozaron la vida de otras familias que de buenas a primeras se enteraron que sus hijos de seis y siete años habían muerto a manos de “locos” que no tuvieron el corazón.

Recientemente, Adam Lanza que perpetuó este asesinato múltiple se dice era un hombre estudioso, que tenía muy buenas calificaciones, pero que parece que el divorcio de sus padres en 2009 lo tenía destrozado.

Estos hechos nos deben de hacer reflexionar a los padres de familia. Para saber educar con amor a nuestros hijos y sobre todo para hacer a un lado los traumas que nosotros como progenitores podamos cargar que muchas veces transmitimos a los hijos. Es importante ser personas ecuánimes y entregadas, dar el ejemplo como ya lo he mencionado en otras ocasiones, pero sobre todo ser personas que saben sacrificarse a modo de entrega y no de sufrimiento.

Nos leemos la semana que entra para no quedarnos atrás y ver hacia delante.

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