Con los mismos temores

La semana pasada fue más pesimista y dura en términos de política monetaria. Les tocó a la FED y Banxico expresar de manera detallada, en las minutas, su visión sobre las tasas de interés y política monetaria. La de Banxico fue de acuerdo a lo esperado: Pesimismo en torno a un escenario que podría incorporar más alzas y dejando claro que la lucha contra la inflación no ha terminado.

Nuestro Banco Central no tendrá decisión de política monetaria en julio, y será hasta el 10 de agosto que decida el rumbo de las tasas después de ver lo que determinará la FED este mes. Como dije, las minutas de la FED fueron pesimistas y duras; tanto, que provocaron en los inversionistas una semana de bajas. Prácticamente lo que se incorpora es que en su junta del 26 de julio subirán la tasa 0.25% y que podría volver a subirla en septiembre, ya que en agosto no habrá. O sea, la FED podría llevar la tasa a 5.75% desde su 5.25% actual.

Una mala noticia para ese país y para el mundo. Acordémonos que vivir con tasas de interés altas es una noticia mala para el crecimiento económico y para la economía en general. Ahora, lo que tendrán que cuidar los bancos centrales es no exagerar con tanta alza o no dejar las tasas altas demasiado tiempo, pues podrían provocar una recesión profunda. Justo hay que procurar el equilibrio entre no dejar que siga subiendo la inflación y, por otro lado, no sumir a los países en una recesión profunda.

Se estimaba que la creación de empleos en Estados Unidos podría salir altísima y ello generó preocupación, porque una creación de fuentes de trabajo exagerada implica tener “caliente” la economía y, por ende, con presiones inflacionarias. Afortunadamente, el dato no fue tan robusto y salió en línea con lo esperado, lo cual disipó ciertos temores por el aumento de precios.

La semana pasada se publicó la inflación en México. Resultó de acuerdo con lo esperado. Sigue confirmando su tendencia bajista. La cifra anual ya se ubica en 5.06% y podría seguir esa trayectoria para terminar el año entre el 4.50% y 4.70%.

Por otro lado, esta semana es muy importante en Estados Unidos, porque el miércoles se dará a conocer la inflación de junio en ese país. Como dije anteriormente, aunque el dato salga muy bien, lamentablemente la FED va a subir la tasa de interés en julio.

También hay decisiones de política monetaria en muchos países. Ya comentaremos qué hacen Israel, Canadá, Nueva Zelanda, Perú y Corea del Sur.

Otro gran tema que habrá que estar vigilando es China; su crecimiento y cifras económicas. Últimamente preocupa su inflación muy por debajo de lo esperado y una fuerte contracción económica. Esto es importante para el crecimiento global pues, por evidentes razones, podría impactar en los precios de muchas materias primas.

En México me sigue preocupando la fortaleza del peso, que no creo que cambie mucho en el corto plazo; pero que, en estos niveles, hace mucho daño a varios sectores de la economía nacional. Hasta ahora, nuestra economía -muy impulsada por la de nuestro vecino- ha mostrado resiliencia y ha tenido un crecimiento económico moderado, por arriba de lo que esperábamos al inicio. Todo indica que podríamos cerrar el año entre 1.7% y 2% anual.

@juansmusi​​​​​​​

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