El TLCAN era mejor

La realidad es que de acuerdo a las circunstancias que hemos vivido el último año y medio, las noticas del USMCA (políticamente rebautizado por capricho y ego del presidente Trump) son positivas, ¿es mejor este acuerdo que nada? sí, sí lo es; ¿es mejor este acuerdo que el TLCAN? no, no lo es y brevemente voy a explicar por qué:

Como todos sabemos, la mejor noticia posible era la extensión y modernización del Tratado original; después de todas las complicaciones vividas, amenazas, volatilidad e incluso un costo real incuantificable, –y aquí me refiero a inversiones que han estado paralizadas, algunas otras desviadas a distintos países y otras que en definitiva se han ido hacia EEUU–, dejamos de recibir miles de millones de dólares, y como consecuencia sacrificamos creación de empleo y crecimiento económico.

La parte positiva del USMCA es que hasta cierto punto estas incógnitas e incertidumbres se terminan, y tenemos la certeza de que México, EEUU y Canadá seguirán siendo socios estratégicos pero con algunas modificaciones en donde hoy identifico como las más importantes: La revisión y renovación del mismo cada seis años, los topes en las exportaciones de automóviles, la prohibición a que establezcamos relaciones comerciales sin aranceles con una lista de países en las que se incluye a China y el incremento en las partes de origen; las afectaciones a la industria textil también relacionadas con certificado de origen (materiales hechos en la región), el condicionamiento de que los empleados ganen un sueldo muy superior si se exceden los topes establecidos, y el hecho de que el aluminio y el acero continuan con aranceles hasta que la firma de este nuevo acuerdo ocurra.

Como pueden observar, estos temas protegen a EEUU por encima de México y Canadá; desde mi punto de vista sí hay un ganador en esta negociación, pero vuelvo a insistir, se hizo lo que se pudo. El mejor reflejo de que este acuerdo no es la panacea, es el tipo de cambio que en su mejor momento y sólo por breves instantes cotizó hasta 18.50, pero muy rápido regresó a su nivel de 18.80.

La otra incógnita que queda por resolver es el tiempo en el que éste se va a firmar, en donde lo más deseable es que ocurra antes de que termine esta administración; pero cabe mencionar que se atraviesan las elecciones intermedias en EEUU, y esto pudiera retrasar la firma algunos meses más. Me quedo con la parte positiva, pero con el realismo de que era mejor el TLCAN.

Estemos pendientes de lo que ocurra el jueves con la reunión de política monetaria de Banco de México, donde las opiniones están muy divididas, con un 50% de posibilidad de que la tasa se quede en 7.75% y 50% de que se vaya a 8%.

@juansmusi

Octubre 3, 2018.

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